HISTORIA

Mi primera máquina de coser era una Singer viejísima que solo cosía hacia delante y hacia atrás. Nada de zig-zag, ni exotismos similares. Una muy parecida a esta:



Con ésta empecé a hacerme mis primeros “modelitos”, sacados de revistas que llevan los patrones de los vestidos fotografiados, y con retales que vendían al peso.

De esto ya hace casi 30 años!!

Luego mi madre me regaló una más moderna, regalada a su vez por un banco donde tenía sus ahorrillos, eléctrica, que cosía incluso botones y ojales! Todo un adelanto!!

Y ahora la que utilizo es una Alfa, que cubre mis necesidades de costuras y composturas… por el momento!

Lo que empezó como un pasatiempo esporádico, se fue convirtiendo en una afición más constante, lanzándome a la aventura de realizar vestidos y chaquetas más complicados. Todo un reto!

En uno de mis muchos viajes a Madrid, localicé la tienda de tejidos de la Maja www.lostejidosdelamaja.es/ en la plaza de Pontejos. Me hice “fan” de ellos al momento, de Miguel y de todos los que atienden que son de lo mejor. Tanto ellos como las telas, como el edificio. Una pasada y el enganchón fue total!

He hecho ropa para amigas (abrigos, faldas, vestidos…), arreglos para amigos (zurcidos, descosidos, botones, bajos de pantalón…) y por supuesto para mi. Hasta me atreví con un traje de noche de pedrería de Chanel, que es una verdadera maravilla.

Y la verdad es que ver “mi obra” puesta en una persona contenta por llevar lo que le he hecho, siempre me ha llenado de orgullo y satisfacción.

Hasta que hace unos días mi hija me sugirió la idea de hacer un blog con las cosas que había hecho, poniendo fotografías, como iba haciendo las piezas…para darlo a conocer a más gente.


Y dicho y hecho: Así nace la historia de “Tiempo de costuras y composturas a domicilio”, para seguir haciendo lo que más me gusta.